Según publican en Vulture, la tercera entrega de Iron Man se queda sin director. Jon Favreau abandona el proyecto, y según algunas fuentes el principal motivo es que Marvel desea introducir un buen número de superhéroes en la película, de tal modo que prácticamente se trataría de una secuela de The Avengers.
Por otro lado también se comenta que su abandono se debe a las elevadas pretensiones económicas de Favreau y a que Marvel le habría presentado a unas ideas muy confusas sobre el filme para de este modo incitarle a que lo abandonara. El salario del director por Iron Man 2 fue de 10 millones de dólares, cifra que debería incrementarse a unos 12 o 15 millones de dólares por los beneficios obtenidos.
Ahora el estudio se encuentra buscando a un nuevo realizador, si bien ha de contar con la aprobación de Robert Downey Jr.
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